En cuestión de seis meses, el Juzgado ha resuelto un concurso de acreedores dictando auto de conclusión y exoneración de las deudas de un ciudadano de escasos recursos que se había sobreendeudado a consecuencia de la pérdida de su trabajo durante la pandemia. Los préstamos solicitados para su propio mantenimiento y el de su familia, mediante tarjetas revolving, y entidades crediticias con altos intereses remuneratorios, intereses de intereses y comisiones por impago, hicieron imposible su devolución.
El equipo jurídico de no más endeudamiento estudió el caso y viendo la viabilidad del mismo, en poco más de un mes presentó la solicitud de concurso persona física y posteriormente la solicitud del EPI.
En palabras del deudor “Una vez exonerado por el Juzgado de todas sus deudas, La Ley de Segunda Oportunidad me ofrece una nueva oportunidad ante la vida”.
eOyuKQbkYox
ipzwsglHdcNWeu
XqfRDJtjNQU